El ministro del Interior de Guatemala, Enrique Degenhart, evadió una citación hoy en el Congreso de la República en la que debía explicar a diputados del partido opositor Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) los recientes cambios en la cúpula de la Policía Nacional Civil.
Degenhart presentó sus excusas y envió a sus viceministros Axel Romero (Prevención de la Violencia y el Delito), Kamilo Rivera (Seguridad) y Manuel Castellanos (Administrativo), quienes no fueron recibidos por los congresistas.
El jefe de bloque de la UNE, Orlando Blanco, mencionó en una rueda de prensa que el ministro había justificado su inasistencia, pues había sido citado también por la Comisión de Gobernación del Parlamento, aunque tampoco se presentó a dicha reunión.
Blanco sostuvo que volverán a citar para la próxima semana a Degenhart para que explique los cambios.
Degenhart se encontraba con la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, en una visita a la brigada de Fuerzas Especiales, y por ello se excusó de presentarse ante la Comisión de Gobernación.
«Lamento informarle que por las funciones propias de mi cargo, fui nombrado con anterioridad como parte de la delegación que acompañará a la embajadora Nikki Haley a la visita que se realizará a las brigadas de Fuerzas Especiales, por lo que solicito su comprensión y colaboración», escribió el ministro en una carta que envió al presidente de dicha Comisión, José Ubico, del partido Todos.
El pasado 27 de febrero, Degenhart nombró a Erwin Rolando Tzi Juárez como nuevo director general de la Policía Nacional Civil, en sustitución de Nery Ramos, en el cargo desde enero de 2016.
Tzi, quien tenía a cargo la División de Puertos, Aeropuertos y Puestos Fronterizos, llega a la institución armada junto al nuevo subdirector general de Investigación Criminal, Nery Neftalí Benito Hernández, en lugar de Stu Velasco, y un nuevo director general del ente que no ha sido nombrado, tras haber sido destituido Erwin Mayén.
Pese a que bajo el mandato de Ramos disminuyó el índice de homicidios por cada 100.000 habitantes de 29,5 a 26,1 (el rango más bajo de los últimos nueve años) y había logrado desarticular a cientos de redes de extorsionistas, el ministro tomó la decisión justificando una «oxigenación» de la institución civil armada.
Los cambios en la cúpula policial fueron percibidos con preocupación por varios sectores de Guatemala, que pidieron estar atentos.
EFE/SN