Se sabe que a uno de los jugadores no le pareció una marcación del árbitro y luego le reclamó airadamente y lo agredió de forma física.
Posteriormente Villalta se golpeó la cabeza, por lo que necesitó de atención medica de forma instantánea. Estuvo prácticamente en coma en el hospital.
Agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) lograron detener al futbolista agresor y fue llevado a un juzgado de Villa Nueva para solventar su situación legal.