Durante la mañana de este miércoles 14 de agosto se desarrolló una conferencia de prensa por parte de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) sobre un caso de defraudación tributaria denominado B410.
La estafa asciende a más 300 millones de quetzales, según informó la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) en una conferencia de prensa.
Son en total 410 empresa que estuvieron involucradas en la comisión de actos de defraudación tributaria. Se sabe que varias de estas ha sido vendedores directos en instituciones del Estado entre 2021 y 2023.
La estructura operaba en direcciones inexistentes y en zonas rojas, diseñando un esquema fraudulento cuyo principal objetivo era apropiarse del IVA y del ISR. A través de esta estrategia, lograron evadir el pago de impuestos, defraudando al Estado por más de 300 millones de quetzales sobre los 6.4 millardos que facturaron.
Esta operación, basada en la manipulación y falsificación de documentos fiscales, les permitió esquivar de manera ilegal sus obligaciones tributarias, generando un impacto significativo en las arcas públicas.
Inicialmente se identificaron más de 200 empresas con domicilio fiscal en la 33 calle C 10-16 de la zona 7, colonia Bamvi, dirección que no existe. Luego de esto, se notó que más de 100 empresas compartían un mismo perito contador. Al contactarlo indicó que fue inscrito sin su consentimiento y dio paso a colocar una denuncia en el Ministerio Público.