Desde la madrugada de este jueves 24 de febrero, la operación militar especial de Rusia inicio sus labores ingresando a diferentes ciudades de Ucrania como parte de su estrategia por defender las regiones separatistas del país.
Los ataques con misiles cobraron la vida de miles de residentes, incluyendo militares; mientras que los que sobrevivieron abandonaron la capital de Kiev hacia el oeste, donde se refugiaron en estaciones de metro junto a sus hijos y mascotas.
Un grupo de militares ucranianos se entregaron ante las fuerzas de Rusia, luego de que lucharan por su país.
Se sabe que son al menos 14 militares, incluida una mujer y un herido, quienes quedaron bajo el régimen de la república rebelde de Donetsk.