Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) comenzaron hoy la cumbre virtual en la que discutirán sobre la necesidad de acelerar los procesos de vacunación y de mantener las restricciones a los viajes no esenciales ante el riesgo de expansión de las variantes del virus.
«La videoconferencia para hablar de la coordinación del Covid-19 (…) acaba de empezar», dijo en Twitter Barend Leyts, portavoz del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Se espera que los líderes europeos acuerden «acelerar con urgencia la autorización, producción y distribución de vacunas, así como la vacunación», según el último borrador de la declaración conjunta.
En ese texto, se constata que «la situación epidemiológica continúa siendo seria y las nuevas variantes plantean retos adicionales», por lo que «deben restringirse los viajes no esenciales».
Los jefes de Estado y de Gobierno, por tanto, mantendrán la decisión de limitar la movilidad que acordaron en la cumbre virtual que celebraron en enero, aunque que el transporte de bienes entre los países de la UE debe continuar, para permitir un buen funcionamiento del mercado único.
No obstante, las trabas a la movilidad han causado el malestar de la Comisión Europea, que ha enviado unas cartas a Alemania, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Suecia y Hungría por aplicar controles en las fronteras que van más allá de lo pactado en esa reunión y deberán responder en menos de ocho días.
Bélgica, Hungría y Finlandia, por ejemplo, han prohibido los viajes no esenciales con todos los países de la UE y no sólo con los que tienen una incidencia acumulada de 500 casos por cada 100.000 habitantes, como se pactó en enero.
También ha causado malestar la decisión de Alemania de pedir pruebas PCR a los transportistas de proceden de la República Checa, dificultando el tráfico de mercancías.
No obstante, según fuentes europeas, los gobiernos «tienen el derecho» a responder al Ejecutivo comunitario y han tomado la decisión «correcta» para evitar la propagación del virus ante las variantes de la Covid-19.
El borrador del comunicado añade que se «continuará el trabajo» sobre el certificado de vacunación que ha propuesto Grecia y que apoyan los países del sur para relanzar el sector turístico.
La idea, no obstante, genera rechazo en países como Alemania o Francia, que quieren evitar crear privilegios entre las personas vacunadas y las que no lo están, en caso de que a las primeras se les permita volar, en contra de los que no han recibido la inyección.
Las restricciones a los viajes se producen en un contexto en el que no se han distribuido todas las vacunas prometidas por las farmacéuticas a las que se les ha autorizado comercializar su fármaco en la UE, Pfizer-BioNTech, Moderna y AstraZeneca.
Hasta el momento, los países de la UE han recibido 40,7 millones de dosis, desde que empezó la campaña de vacunación a finales de diciembre.
Por eso, los líderes de España, Bélgica, Dinamarca, Lituania y Polonia enviaron el martes una carta a Michel en la que le decían que se necesita «urgentemente integrar y dirigir estratégicamente nuestra cadena de valor para impulsar las capacidades de producción de vacunas en Europa» y reclamaban construir nuevas fábricas en la UE.
La cumbre continuará mañana, viernes, con un encuentro entre los líderes europeos y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, para hablar sobre la política de seguridad y defensa. EFE