En lo que han descrito como «primer estudio de este tipo», un grupo de científicos estudió los compuestos químicos que se encuentran en el hueso y la cáscara, descubriendo así que estas partes no comestibles podrían ser usadas para cualquier cosa, desde recetas médicas hasta tuberías de PVC. Los investigadores molieron 300 huesos de aguacate secos, luego se procesó en aceite de hueso y cera de cáscara. El equipo realizó grandes descubrimientos durante el análisis del aceite y la cera, mismos que presentaron en una reunión de la American Chemical Society.